Ya sea para conseguir un “colocón” más potente, por comodidad para mover y almacenar el cannabis o simplemente por curiosidad, el concentrado de marihuana es una práctica muy común que se fué perfeccionando a lo largo de los años.
Actualmente contamos con una gran variedad de concentrados de cannabis. Esto se debe a que el CÓMO lo concentramos juega un rol fundamental y es lo que decide el producto final que conseguiremos.
Pero antes de comenzar con las variedades y particularidades de cada extracto, comencemos por lo más básico…
¿Que se extrae de la planta de cannabis?
En un concentrado, siempre se busca extraer únicamente los elementos psicoactivos del cannabis, siendo estos los cannabinoides, los terpenos y los tricomas.
Elementos psicoactivos del cannabis
- CANNABINOIDES
Los cannabinoides son compuestos químicos que actúan sobre nuestro cuerpo y cerebro humano. Se han logrado aislar 113 cannabinoides distintos de la planta de marihuana. Los más importantes y conocidos son el THC, responsable del “colocón” o “pegue” de la planta, y el CBD, responsable de gran cantidad de propiedades saludables del cannabis. La composición de cannabinoides de una planta determina en gran parte el perfil de una planta.
- TERPENOS
Compuestos orgánicos que tienen un fuerte olor y se encuentran dentro de plantas e incluso… ¡insectos!. Se han encontrado más de 120 terpenos en el cannabis, responsables de darle sabor a la planta y potenciar y modificar sus efectos psicoactivos. Un concentrado ideal deberá aislar y conservar los cannabinoides y terpenos de una planta.
- TRICOMAS
Los mencionados cannabinoides y terpenos del cannabis se producen dentro de sus tricomas. Seguramente alguna vez viste esa “pelusa” blanca y brillante que se encuentra en los cogollos de la planta, ¿verdad?. Esta “pelusa” son los tricomas y son los culpables de que una planta madura y florecida sea pegajosa al tacto, gracias a la resina que contienen y que liberan al ser manipulados.
Si bien todo concentrado consiste en separar los tricomas de las flores, y de esta forma concentrar los cannabinoides y terpenos, existen muchísimas formas de hacerlo y el resultado varía muchísimo. Para empezar, podríamos decir que los concentrados de cannabis se dividen en dos grandes grupos:
- Concentrados: acumulación de terpenos que no utilizan ningún tipo de solvente para lograrlo.
- Extractos: un tipo de concentrado que se hace a partir de algún solvente (alcohol, dióxido, carbono, etc).
Algunos ejemplos de CONCENTRADOS son “kief”, que se consigue tamizando la planta en seco, “hachís”, rey de los prensados que es básicamente kief prensado, “ICE”, extracción utilizando hielo y agua, y “Rosin”, se extraen los tricomas mediante presión y calor y se caracteriza por un fuerte efecto psicoactivo.
Hay que tener en cuenta que en el ambiente cannábico y a diferencia de una clase de química, el agua no es considerada un solvente y es por esto que el ICE se considera un concentrado y no un extracto.
Por el lado de los extractos, como ejemplares famosos podemos encontrar shatter, wax, crumble o live resin, entre otros. Estos se producen utilizando un solvente externo para separar los elementos psicoactivos del cannabis y el cómo se trate, seque y condense va a influir mucho en el producto final, incluso si utilizamos una misma materia prima y un mismo método de extracción.
Pues como ven los concentrados de marihuana son muchos y ofrecen una gama de colores, formas, texturas y sabores completamente distintos entre ellos. Sabemos que las opciones son varias y tanta información puede ser abrumadora, así que si estás por Barcelona, te proponemos que te acerques a tu asociación cannábica de confianza, como CUBE BCN, ¡y los pruebes por ti mismo!.